Mexicanas en la mira: Angelina de Lucas y Deux Souliers

 

Toto, I've a feeling we're not in Kansas anymore

Dicen que la magia ocurre fuera de nuestra zona de confort. Ese confort que representa un estado mental donde la ‘estabilidad’ y el ‘miedo’ logran, en ocasiones, mandar los sueños a lo más recóndito del inconsciente.

Después de un semestre fuera de mi zona de confort descubrí que luchar por lo que quieres, y cómo lo quieres, debe ser lo único que te despierte todas las mañanas. La gente que conocí a lo largo de este tiempo me demostró que lo único que pasa cuando te levantas y vives es pura y llana magia, de esa que ni uno mismo creía que algún día podría ser posible.

Angelina de Lucas es una de esas personas, una mujer imparable, incansable y por mucho, una maga de su propio destino. No sólo tuve la fortuna de conocerla, sino que ahora comparte con nosotras el impulso que la ha llevado a darle significado a esta frase.

Incursionar en la industria de la moda nunca ha sido fácil, pero incluso lograrlo más allá de las fronteras de tu propio país, algunas veces puede parecer frustrante y muchas veces más hasta imposible. Sin embargo, Angelina, quien nació en Mexicali Baja California, es mujer digna de admiración y reconocimiento.

Angelina vive en Barcelona desde el 2011 y lleva dos años trabajando en Deux Souliers con Nunu Solsona, diseñadora y fundadora de la marca. Diseñadora de formación y después de haber tomado un curso de patronaje e historia de la moda, Angelina decidió abrirse paso y lograr sus metas. 

 Fotografía: Marçal Vaquel (marssal.net)
 Dirección de Arte por: Albert Folch (folchstudio.com)

 Campaña SS 2013. 

Angelina, ¿cómo fue la decisión de estudiar en el extranjero?

Realmente fue difícil irme de México. En primera instancia quería irme a estudiar al distrito federal, pero después de estudiar la universidad y tomar un diplomado previo en mercadotecnia decidí irme a Barcelona.

¿Por qué zapatos? ¿Por qué estudiar un master de la industria del calzado?

Bueno, la verdad creo que los zapatos siempre trascienden y al pasar de generación en generación también van haciendo historia, desde la producción, la manufactura, la distribución y la venta. Pasan por tantas manos para lograr ser un producto final, y eso, los hace imprescindibles.  

¿Cómo llegaste a ser asistente de diseño en Deux Souliers?

Estudié un master en la Escuela Superior de Diseño y Moda Felicidad Duce en Barcelona, el cual duró un año. Después de unos meses, tuve la oportunidad de realizar un periodo de prácticas profesionales con Nunu. Estuve un año trabajando y estudiando, lo cual me dio la oportunidad de aprender de manera teórica, y práctica, al mismo tiempo. Mucho de lo que aprendí en la escuela después lo llevé a la práctica en Deux Souliers, pero aprendí muchísimo con Nunu. Y es que  realmente no conocía el paso a paso de los procesos, y mucho menos de una industria tan compleja como lo es la de la moda. Considero que he aprendido bastante desde el primer día que llegué aquí y desde entonces ha sido un aprendizaje constante.

¿Qué es lo que más te ha marcado, profesionalmente hablando, durante estos dos años?

Desde que entré, en febrero de 2011, creo que me han marcado muchas cosas. Por un lado, tener la oportunidad de ir a fábrica, conocer el proceso de fabricación de un zapato, después asistir a las ferias en Europa, donde diversas marcas, pequeñas y grandes asisten, son creativas y te muestran las afinidades y las diferencias entre empresas que, finalmente, se dedican a lo mismo, pero no son iguales. Finalmente, me ha marcado aprender algo fundamental: las tendencias en zapatos no están determinadas únicamente por el coolhunting o por una sola persona, sino que se marcan desde el proceso de elegir una piel, ¿por qué esa piel? ¿Por qué esa hebilla y no otra?, ¿ya sabes? pasando por la marca, ¿qué busca proyectar la marca? ¿Qué temporada es?, hasta lograr un producto final. Terminado. Un producto que se lleve a los escaparates, y después, a las calles. También aprendí que muchas veces una marca, puede tener mayor impacto, incluso en otros países que en el propio. En el caso de Deux Souliers, por ejemplo, tiene mucho éxito en Alemania, mucho más que en Barcelona y Catalunya. 

 

¿Cuáles son los elementos que consideras hacen exitoso a Deux Souliers?

El elemento que lo hace exitoso es que es un producto, que tal como lo dice su nombre, busca un equilibrio entre dos conceptos, dos zapatos, dos impulsos: avanzar y caminar. Deux Souliers conjuga tanto la artesanía como la vanguardia. Desde el savoir-faire, donde las pieles y los materiales naturales son importantes, pasando por una gran dedicación en las técnicas artesanales y los detalles como: modificación de pieles, costuras, pintados a mano y acabados precisos. Además de ofrecer gran versatilidad en un mismo modelo, ya que las piezas son flexibles y pueden quitarse y ponerse.

Por último Angelina, ¿Qué es lo que puedes decir es necesario para trabajar en la industria de la moda? Es decir, la fórmula perfecta no existe, pero ¿consideras que hay que contar con ciertas características para lograr un trabajo en este círculo? Considero que lo importante es ser creativa, ofrecer soluciones concretas, mejorar procesos, aprender idiomas. ¡Aventarse!, en pocas palabras. Pienso que lo más importante es salir al mundo, ser valientes y creer en lo que se quiere.

Angelina no sólo es ejemplo de que dar un paso adelante, cada día, nos acerca más a nuestras metas, pues esto la ha llevado a conquistar sus sueños y formar parte de esta gran y poderosa industria, este  ‘imperio de lo efímero’ como le llamaría Gilles Lipovetsky, sino que ha hecho de su caminar un avance tan firme y conciso que con sólo poner un pie delante del otro la ha llevado a conseguir lo que quiere… pero hay que recordar que la magia sólo sucede si se llevan puestos los zapatos correctos.    

 Fotografía: Marçal Vaquel (marssal.net)
 Dirección de Arte por: Albert Folch (folchstudio.com)
 Campaña SS 2013. 

Enriqueta Arias.  <3 <3